Las Novelas de la Bienal
13 septiembre 2019En el marco de una clínica de obra con Hernán Ronsino, tres escritorxs desarrollaron sus novelas que fueron publicadas por las editoriales Entropía, Conejos y Notanpuan. Se presentaron en La Bienal
Bajo la lluvia, trueno o relámpago, de Fermín Acosta
Más que una sombra terrible es una voz, o el eco de una voz, lo que resuena por la pampa y atraviesa la trama de Bajo lluvia, relámpago o trueno: la voz de una mujer que busca su destino final, la voz de una muerta que interpela, que indaga, que da órdenes. Una voz que empuja a Rudes, Elena y la narradora a recorrer, con el cajón a cuestas, la siempre imprecisa distancia hasta Villa Evangelina, el lugar donde la muerta pidió ser enterrada.
La travesía de esas tres mujeres en la carreta de Pedernera –el hombre al que le falta un ojo– va dejando un surco en un tiempo, vagamente localizable en algún punto del siglo XIX, y en un espacio de contacto inmediato con una naturaleza que ya no existe: hierbas, flores, plantas, animales, cielos, horizontes. Un campo lleno de amenazas y de posibilidades, un campo que abre las puertas a la verdadera experiencia.
Fermín Eloy Acosta construye, con un oído notable, una lengua extrañísima que funciona como punto de condensación de un universo a la vez fantástico y marginal. Una lengua que repone palabras en desuso y las hace circular con un lustre nuevo, con un brillo poético. Ahí, en esa lengua, en su modo de encabalgarse, reside la fuerza de este texto; es desde allí que brota ese sonido espectral que no para de acechar.
Hernán Ronsino
Esto que me pasa, de Fremdina Bianco
Esto que me pasa es una novela donde las voces y los cuerpos de un trío endemoniado de chicas se defienden como pueden en un pueblo de Misiones. La religión, la familia, los novios y los amigos se cruzan en secuencias que incluyen preparativos para el carnaval, para casamientos, bailes, funerales y vida religiosa. Una mezcla de espacios que se vuelve un mismo, y casi monolítico, pero lleno de filigranas, espacio de opresión; y cobra vida en las voces de estas tres chicas que, si escaparon de una novela de Manuel Puig, no fue para repetir esa hermosa literatura que nos transformó para siempre como lectores y como escritores sino para mostrar lo lejos que estamos, todavía, de romper con algo de aquellos mundos de secretos y mentiras.
Félix Bruzzone
Chau, chau, chau, de Florencia Gómez García
Meter un gol de penal usando los números del teléfono para ganarse un departamento amueblado en Puerto Madero. Al menos, esas son las reglas del concurso, que realizan en uno de los programas más exitosos de la televisión argentina.
Con la promesa de la entrega del departamento, arranca Chau chau chau, el primer libro que publica Florencia Gómez García, seleccionado por el jurado de la Bienal de Arte Joven Buenos Aires - Convocatoria Novela 2019. Ambientada en el 2001, la historia narra las problemáticas que viven una adolescente, su madre y también una tercera mujer, que les alquila el departamento donde viven, alternando el drama con escenas de humor. Se trata de una novela de iniciación, con la televisión como centro de la vida cotidiana.
Florencia Gómez García aparece en el sistema literario argentino con una atractiva voz propia que despertará el interés de muchos lectores. Chau chau chau nos involucra en la vida de sus protagonistas y es difícil olvidarse de ellas cuando la novela llega al final.